martes, 1 de enero de 2008

Buenos propósitos

Es lo que se suele hacer el 1 de enero, comenzar el año haciendo buenos propósitos. Adelgazar, hacer deporte, dejar de fumar, comer más sano, cuidar las amistades... lo de siempre. Lo intentaremos, Dayán.

En mi caso hay otros.

Intentaré no hablar mal de la prensa... bueno, esto no es un propósito, es un deseo imposible. No, esto no lo voy a cumplir mientras ellos sigan haciendo lo que yo considero malaprensa. Además, ¡qué coño, es divertido!.

Hay que olvidarse de los malosvecinos, que al fin y al cabo están en una categoría inferior... no, es imposible mientras sigan jugando en el Rico Pérez Herculano. Sí, ya sé que legalmente pueden jugar, lo que me molesta (y mucho) es la forma en que lo hicieron, con mentiras y con desprecios, tanto al Hércules como a sus antepasados (los nuestros y los suyos). Ya se sabe, es el peligro que corre todo club cuando entran los nuevos aficionados de toda la vida, que se pasan la moralidad por el forro con tal de fardar de algo que no sabía ni que existía hace unos años.

Además, no puedo olvidarme de ellos mientras sigan sus oficinas en el Rico Pérez. Recuerda que el 3 de enero tenemos una cita, aunque quizás la retrase al día 4 porque el día 3 me apetecerá escribirte del partido de Copa. Total, lo que te pueda contar/recordar el día 3 será lo mismo que lo que haré el día 4.

En cuanto a los políticos... los doy por imposibles.

En fin, ha pasado un año nuevo y todo sigue igual. ¡Qué depresión!